Producto de una cultura
propia y reflejo del ambiente cultural y social que fue conformando
a lo largo de la historia una identidad singular, el himno gallego
aparece como el símbolo acústico más solemne
y trascendental de Galicia como comunidad política.
Estrenado en 1907 en
La Habana, fruto, como la bandera y el escudo, de la emigración.
En 1908 se hará oficial. En su elaboración se conjugan
las partituras de Pascual Veiga y el poema "Os pinos"
de Eduardo Pondal. El motivo central es muy simple: que Galicia
despiete de su sueño y comienze el camino cara la Libertad
El Nombre de Galicia
no figura en ninguna parte del poema, como es habitual en Pondal,
siendo substituído por "Fogar de Breogán".
Se le pide que despierte de su sueño, que no olvide las
injusticias y que escuche la voz de los "rumorosos piñeiros",
que viría siendo el pueblo gallego.
Desde 1907 hasta 1923
el himno gallego fue cantado por regionalistas y agraristas en
sus actos y poco a poco fue siendo aceptado por muchos más.
Los centralistas lo asumirian, finalmente, en la campaña
electoral de 1977. Durante la época anterior a la República
se prohibieron tódos los símbolos regionales. De
aquella, las sociedades gallegas de América intensificaron
su interés por la expresión pública del himno.
Con la II República el amor por el se intensificó
como expresión de una Región dentro del Estado Integral
que se constituyo.
Mientras duró
el período franquista, hasta la etapa de aperturismo, solo
se cantaba, como mucho, en actos culturales y como una canción
más dentro del folklore gallego. Desde 1960 comienza a
interpretarse de manera más explícito, aínda
que disimulando sus aspectos ideológicos.
En 1975, mientras tenian
lugar unos actos folklóricos en la fiesta del Apóstol,
la gente comenzó a levantarse cuando el himno se cantó.
Al año seguinte se instauró este costumbre de manera
definitiva en la "Praza da Quintana", ratificado también
por las autoridades asistentes.
Ademas del celtismo
y del helenismo siempre presentes en la obra de Pondal, fue su
capacidad para penetrar en los sentimentos del pueblo y expresar
sus aspiraciones fundamentales, lo que posibilito su exito
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